Ministra de Justicia suscribió acuerdo reparatorio en caso documentado por la Comisión de la Verdad
La víctima agradeció la promulgación de la Ley de Reparación y las gestiones gubernamentales que aportan a garantizar los derechos humanos. “Gracias al Presidente por darnos esta oportunidad de volver a soñar”, afirmó.
Para la Ministra de Justicia, la suscripción de este acuerdo indemnizatorio, junto con la reparación inmaterial busca cerrar el capítulo de violaciones a los Derechos Humanos que vivió el país. “El compromiso del Estado ecuatoriano es la reparación y la no impunidad en casos de violaciones a los Derechos Humanos. Sabemos que esto no repara de manera total la tortura que vivieron las víctimas de las graves violaciones a sus derechos fundamentales pero reconocemos los hechos, asumimos la responsabilidad y cumplimos como Estado con este acuerdo”, afirmó Zúñiga, durante la suscripción del documento.
La Secretaria de Estado informó además que este es el tercer acuerdo suscrito. “Tenemos en un trabajo coordinado con la Procuraduría General del Estado, siete más que están siendo revisados para que una vez que se llegue a un acuerdo con las víctimas se de los puedan firmar tal como lo establece el Reglamento de la ley”, acotó.
El caso C12, documentado por la Comisión creada en el 2007 por Rafael Correa, se refiere a las torturas que sufrió la víctima en el año 1985, a manos del grupo policial denominado Servicio de Investigación Criminal (SIC).
Este acuerdo reparatorio se suscribe dentro del marco de la aplicación de la Ley para la reparación de las víctimas y la judicialización de graves violaciones de derechos humanos y delitos de lesa humanidad ocurridos en el Ecuador entre el 4 de octubre de 1983 y el 31 de diciembre de 2008, aprobada en 2013, la cual garantiza la judicialización de los casos documentados por la Comisión de la Verdad en el informe “Sin verdad no hay Justicia”; y contempla una indemnización por daños materiales o inmateriales producidos a consecuencia de las graves violaciones de derechos humanos.