Un recorrido por los oficios tradicionales de Quito a través de fotografías

Quito (Pichincha).-Pasear por el Centro Histórico de Quito es como retroceder en el tiempo. Sus majestuosas iglesias, sus casas coloniales y sus estrechas calles envuelven a los transeúntes que diariamente lo recorren, en un ambiente de nostalgia. Pero este sitio emblemático de la Capital no solo encierra riqueza material sino también inmaterial, como es el caso de las personas que aún conservan antiguos oficios, a estas alturas convertidos en una importante herencia cultural.

 Rescatar y poner en escena lo valioso de esas actividades a través de fotografías es lo que busca la exposición “Quito, Patrimonio Vivo”, que tendrá como escenario el pretil del Palacio de Gobierno, desde el viernes 8 de septiembre al miércoles 13 de septiembre, como parte de los eventos para recordar los 39 años de declaratoria de Quito como Patrimonio Cultural de la Humanidad otorgado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Esta recopilación de imágenes es el resultado del trabajo de los fotógrafos de la Presidencia de la República, quienes recorrieron el llamado ‘casco colonial’ en busca de esos personajes que han sobrevivido con el tiempo, como Jorge Rivadeneira, experto en la elaboración de trompos. En su taller, ubicado junto al ex penal García Moreno en el barrio de San Roque, un trompo de gran tamaño que no deja de girar le da la bienvenida a los clientes habituales del maestro. “Principalmente son los abuelos que vienen con sus nietos a comprarles este juguete de antaño, yo les vendo y les enseño hasta 40 maneras de hacerlo bailar. Aún existimos muchos que nos dedicamos a este oficio que ahora ya es una tradición”, comenta.

 En cambio, en la calle Olmedo y Guayaquil, está Bolívar León, quien por más de 30 años arregla relojes y aunque admite que con el ‘boom’ de los celulares la gente ya no usa este accesorio, aún tiene sus clientes fijos por su habilidad para realizar esta labor que implica una alta dosis de paciencia. “Creo que este oficio no desaparecerá”, dice y la muestra de ello es su hijo mayor, quien heredó esta habilidad.  Ellos, junto a otros artesanos, forman parte de la muestra fotográfica que se podrá recorrer como parte de las visitas guiadas habituales por la sede de Gobierno, que recibe diariamente a turistas nacionales y extranjeros.

 Según cifras proporcionadas por la Dirección de Gestión Cultural de la Presidencia, 12.758 personas visitaron el Palacio de Gobierno solo en agosto, convirtiéndose en una de las edificaciones patrimoniales más visitadas por la gente. GFS/El Ciudadano