Corte de Nueva York escucha el martes testimonios sobre secta sexual en caso Nxivm

El martes continúa en Nueva York el juicio a Keith Raniere, el líder de la secta sexual que se escondía presuntamente detrás de Nxivm, -una empresa que ayudaba a alcanzar el empoderamiento y desarrollo profesional-, pero del que testigos cuentan espeluznates historias.

Raniere está siendo enjuiciado por cargos de tráfico sexual, crimen organizado, explotación y pornografía infantil-, está arrojando luz sobre un caso que se espera concluya a mediados de junio.

La Voz de América sigue el juicio que se celebra en una corte de Brooklyn, en la que está prohibido a reporteros pasar teléfonos celulares ni computadoras.

En la jornada del martes interviene por segunda ocasión Daniela, una joven mexicana, quien sostiene que junto a sus dos hermanas fue víctima de Raniere, -de 58 años y también conocido como “Vanguard”-, cuando éstas eran aún muy jóvenes.

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Nxivm, conocido grupo para ejecutivos, según testimonios en la corte, habría sido la fachada para el funcionamiento de una secta sexual, por medio de dos grupos secretos.

Las versiones entregadas en corte narran que DOS era el nombre de uno de ellos, grupo que integraban las que Raniere elegía como esclavas. El segundo grupo habría recibido el nombre de Sociedad de Protectores, en el que se le enseñaba a los hombres cómo dominar a las mujeres. Se dividían en “esclavas” o “amas”.

Nxivm, que comenzó bajo otro nombre en 1998, tenía su sede en Albany, Nueva York, y operaba centros de autoayuda en América del Norte y Central.

Según los fiscales, Raniere se presentaba como la “persona más inteligente y ética del mundo”, comparándose con Albert Einstein y Mahatma Gandhi. Al mismo tiempo, manipulaba y chantajeaba a mujeres, entre ellas adolescentes, dentro de su sociedad secreta.

El caso despierta interés en la región porque varias personas de México tuvieron relación con Raniere. Entre ellos figura Emiliano Salinas, el hijo del expresidente mexicano Carlos Salinas (1988-1994), quien actuó como representante de Nxivm en México. Salinas ha dicho que no tiene relación alguna con la secta sexual y sostiene que rompió con el grupo cuando supo lo que ocurría allí.

Raniere se ha declarado inocente de todos los cargos. Si es condenado, podría enfrentar cadena perpetua.

(Escrito por Rosa Tania Valdés)