Las mujeres sufren de forma desproporcionada los estragos de la sequía y la desertificación
Pese a la dependencia humana de la tierra, “la tratamos como un lodazal”, afirma el titular de la ONU. António Guterres solicitó ayuda para que las mujeres y las niñas desempeñen su papel en la protección de “nuestro recurso más preciado”, para acabar con “la degradación de la tierra para 2030″.