Se inaugura el complejo judicial más grande del Ecuador
La transformación de la Justicia en Ecuador que se impulsa a partir del año 2012, tiene resultados positivos para la ciudadanía del país. Para el Presidente de la República, Rafael Correa, este nuevo complejo es el más moderno de América Latina.
La entrega de esta obra la realizaron el Presidente de la República, Rafael Correa, el presidente del Consejo de la Judicatura, Gustavo Jalkh y la presidenta encargada de la Asamblea, Rosana Alvarado. Además participaron la vicealcaldesa de Quito, Anabel Hermosa y un delegado de la justicia peruana, Bonifacio Meneses, quien entregó un reconocimiento a la justicia ecuatoriana por los cambios efectuados durante esta década.
Esta nueva edificación concentra el 95 por ciento de las unidades judiciales en el norte de la capital ecuatoriana y tiene como finalidad brindar un mejor servicio a la ciudadanía orientado en la eficiencia, modernidad y transparencia. La infraestructura con la que cuenta este centro judicial la ubica como pionera en Ecuador y vanguardista en América Latina. Sus salas, equipamientos y tecnologías permiten que la transparencia sea uno de los principales objetivos de la función judicial.
Además abarca en su gran mayoría las materias judiciales, como: penal, familiar, contencioso administrativo, contencioso tributario, archivo y defensoría pública. En su discurso en presidente del Consejo de la Judicatura, Gustavo Jalkh, aseguró que “en esto de la justicia hay que empezar con uno mismo; justo con uno y justo con los demás”, y aclaró que en el año 2004 “se imponía la famosa ‘Pichicorte’, con el afán de atar la justicia ecuatoriana a intereses económicos y políticos”. “Acá se conjugan modernidad con eficiencia, dignidad con transparencia, infraestructura, tecnología, jueces con origen meritocrático”, enfatizó Jalkh.
Al respecto de la corrupción la descartó y repudio tajantemente anunciando que ese tipo de comportamientos tienen que ser sentenciador por la justicia del país y parafraseó al Papa Francisco, “quien lleva dinero corrupto a su casa ofrece pan sucio a sus hijos”. Finalmente aseguró que la Justicia es “la virtud del alma para dar a cada quien su dignidad”. /AD El Ciudadano.
